LA CREACIÓN

LA CREACIÓN
DIOS CREA, EL HOMBRE TRANSFORMA

miércoles, 9 de noviembre de 2016

LA RUTINA

Maestro y alumno paseaban por los jardines de la curiosidad cuando de repente el maestro decidió cambiar de sendero rompiendo la rutina que tenían establecida desde hacía unos días.

- Maestro, ¿por qué hemos cambiando de recorrido esta mañana?

- Para romper la rutina, es una amiga peligrosa

- ¿No es un buen hábito tener hábitos, maestro?

- Las costumbres matan la genuinidad de las cosas haciendo que pierdan la raíz de su por qué y nos olvidemos de su esencia.

- No lo entiendo, maestro, no veo qué tiene de malo acostumbrarse a las cosas.

- Dime joven ¿sabrías decirme qué árbol hay al principio del sendero que hemos cogido estos últimos días? – le preguntó

- No recuerdo… Un seto tal vez, está lleno de setos por aquí.

- Es un Sauce llorón – le contestó el maestro

- ¿Y cuál hay al principio de este nuevo camino?

- Este sí que lo sé porque me he fijado cuando ha girado usted. Es un Cedro frondoso.

- La rutina, joven, hace que dejes de prestar atención y que actúes sin pensar cuando es mejor, y más sabio, pensar en cómo actuar.

- Entiendo, maestro, entonces cuando actuamos por rutina dejamos de darle la importancia que se merece a aquello que hacemos.

- Tú lo has dicho, joven, es más fácil repetir las cosas sin pensarlas que pensar en lo que debemos, o no, repetir.

- Estoy confundido, maestro, quiere usted decir que ¿pensar en lo que hacemos justifica el por qué lo hacemos?

- Sí, joven, y no solo el por qué lo hacemos, también justifica y/o testifica de lo que no hacemos. Cuando actuamos por rutina aparcamos todo sentido de responsabilidad y de concienciación y nos abandonamos a protocolos preestablecidos que anulan nuestra razón. La rutina transforma los actos simbólicos en rituales asépticos e inútiles.

- Entonces, maestro, es mejor cambiar de hábitos que de caer presos de su rutina.

- Cuando se trata de una senda, sí, pero cuando se refiere a un acto al que nos debemos entregar, con total sinceridad, periódicamente como la oración, la comunión, los abrazos, etc…, entonces la única forma de evitar la rutina es siempre darle la importancia que tuvo para nosotros el primer día. Hacer que lo genuino persista en nuestra mente y en nuestro corazón para siempre.

- Ahora entiendo maestro, pues tengo muchas rutinas que enmendar – y se quedó pensativo

- Todos las tenemos joven, nada nuevo bajo el sol. La mente humana es perezosa y siempre busca lo más cómodo, cuanto menos piensa más da que pensar. Jajaja

Las risas fueron el punto final de una conversación sin “hábito” de lucro.

Porque las costumbres de los pueblos son vanidad: cortan un leño del bosque, luego lo labra el artífice con su cincel (Jeremías 10:3)

Y sabréis que yo soy Jehová; porque no habéis andado en mis estatutos ni habéis obedecido mis decretos, sino que habéis hecho según las costumbres de las naciones que os rodean. (Ezequiel 11:12)

Que Dios os bendiga, Alfons <><

Primera edición del libro electrónico con 1 año de reflexiones, versículos e ilustraciones de Manuel Redondo, a la venta en Amazon:
http://www.amazon.com/dp/B00D7IM000

http://www.facebook.com/UnDiaUnaReflexionUnVersiculo
http://un-dia-una-reflexion-un-versiculo.blogspot.com/
http://undiaunareflexionunversiculo.wordpress.com/

Església Evangèlica La Gràcia de Déu
Ciutat de Balaguer, 40, Barcelona
Cada domingo a las 18 00, ¡OS ESPERAMOS!

No hay comentarios:

Publicar un comentario