Un día, una reflexión, un versículo: Agradecer es de sabios

Los valores pesan en la conciencia más su ausencia la destruye. El saber agradecer es uno de los más importantes pero a menudo de los más ignorados.

Sabemos pedir y pedimos mucho, somos humanos, pero ¿Nos acordamos de agradecer o hacemos nuestros los éxitos negando lo concedido por nuestro Padre?

Hubo un viejo campesino que tenía un vecino con quien competía por ser el primero en poder vender su cosecha y así tener más dinero.
Año tras año mientras el primero oraba en agradecimiento al Señor por su cosecha el segundo aprovechaba el momento para ir al pueblo y vender la suya.
En el alba del ultimo año mientras el primero seguía orando el segundo fue sorprendido por una terrible tormenta cuando llevaba su cosecha al pueblo. Un rayo le arranco la vida y quemo sus pertenencias.
Más nunca nadie más se adelanto al primero.

"El que hace caso del día, lo hace para el Señor; y el que no hace caso del día, para el Señor no lo hace. El que come, para el Señor come, porque da gracias a Dios; y el que no come, para el Señor no come, y da gracias a Dios". Romanos 14:6