Maestro y alumno se paseaban por el jardín del
conocimiento, cuando mirando un enjambre de hormigas el alumno preguntó:
-
¿Maestro qué es un líder?
-
¿Quién dirías tú que lidera
este enjambre de hormigas?
-
No lo sé, las veo
alborotadas pero cada una parece saber su cometido.
-
¿Qué dirías ser los
atributos de un buen líder, joven?
-
¿Que todos lo sigan?
-
Ah, ¿y cómo se consigue eso?
-
Pues sirviéndolo, ¿no?
-
Entiendo ¿qué más?
-
El que manda, el que es
querido porque da lo que se le pide. El que es escuchado porque sabe más que
los demás, el que….
-
Vale, vale, creo que
comprendo lo que pretendes decirme, y cómo crees que se aplica eso a este
enjambre de hormigas
-
Pues la verdad es que no lo
sé, pero supongo que muchas cosas son diferentes entre hombre y animal.
-
Tienes razón existen muchas
diferencias pero una de la cualidades esenciales es la misma. El líder de las
hormigas es la Reina, ¿la puedes ver?
-
No
-
Eso es muy importante, el
buen líder es aquel del que se ve el resultado de su autoridad sin verlo a él.
-
Por el resto creo que has
definido muy bien el no líder, o jefe.
-
El
alumno manifestó su sorpresa. El maestro continuó:
-
El líder no manda, inspira.
Quiere más que se hace querer. Te da lo que necesitas más no lo que deseas.
Escucha más que habla. Es aquel que sabe que la sabiduría no se exhibe, se practica
en discreción y humildad. Un líder nunca está por encima de ti, sino a tu lado.
Te acompaña más que tú le sigues. También es capaz de firmeza cuando se precisa
pero sobre todo de cariño cuando lo necesitas. Su autoridad se fundamenta en el
amor hacia los demás y no en el temor de los demás. ¿No te recuerda esto a alguien
joven?
-
Sí maestro, a Jesús
-
Tú lo has dicho y bien dicho
está. Es el modelo perfecto. Un Dios que se humilla a ser humano por amor hacia
nosotros. ¿Qué mejor ejemplo?
¿Quieres
ser el primero? Empieza por la cola y síguele,
aprende sus enseñanzas leyendo una y
otra vez LA Palabra. Y entenderás rápidamente que en esta vida querer ser el
primero es un objetivo equivocado, mas querer servir primero, un camino seguro
hacia Él.
-
Ahora lo entiendo maestro,
pero este tipo de líder no tiene encaje en este mundo porque no conozco ninguno
que obre así.
-
Eso quiere decir que hay más
de los que te puedes imaginar, invisibles a la vanidad del hombre pero visibles
a la mirada de Dios. No los veras pero cuando te cruces con uno de ellos/ellas sentirás
su obra como perfume celestial. Tú también puedes ser uno de ellos: Obrero de Dios
en la sombra de este mundo, como estas hormigas, ¿lo ves? Al final no somos tan diferentes.
Maestro y alumno continuaron paseando por el jardín
dándole una oportunidad al silencio.
25 Entonces Jesús, llamándolos, dijo:
—Sabéis que los gobernantes de las naciones se enseñorean de ellas, y los que son grandes ejercen sobre ellas potestad. 26 Pero entre vosotros no será así, sino que el que quiera hacerse grande entre vosotros será vuestro servidor, 27 y el que quiera ser el primero entre vosotros será vuestro siervo; 28 como el Hijo del hombre, que no vino para ser servido, sino para servir y para dar su vida en rescate por todos. (Mateo 20:25-28)
—Sabéis que los gobernantes de las naciones se enseñorean de ellas, y los que son grandes ejercen sobre ellas potestad. 26 Pero entre vosotros no será así, sino que el que quiera hacerse grande entre vosotros será vuestro servidor, 27 y el que quiera ser el primero entre vosotros será vuestro siervo; 28 como el Hijo del hombre, que no vino para ser servido, sino para servir y para dar su vida en rescate por todos. (Mateo 20:25-28)
No hay comentarios:
Publicar un comentario