JUICIO

Desde que el hombre empezó a juzgar se equivoca porque Dios no tiene sustituto. (Anónimo)

Al hombre le gusta tanto observar la paja ajena obviando su propia viga que para ello inventó la justicia.

Nadie en su sano juicio puede confiar en la justicia de los hombres. No es un juicio de valor, mas sí el sin valor del juicio que imparten.

El que no teme ser juzgado no respeta a los demás, y el que no respeta a los demás acaba siempre desacreditándose a sí mismo perdiendo el juicio.

Cuando alguien va a juicio siempre sale con alguna mancha tanto el demandante como el demandado porque no solo se juzgan los hechos, también las personas.

Es mejor obrar para no caer en juicio que dejar que la suerte nos condene.

Si la justicia exige un juez imparcial e impoluto este mundo es profundamente injusto.

Se representa la justicia como una dama con los ojos vendados, una balanza en una mano y una espada en la otra. Probablemente el único acierto de su declaración de intenciones: matar a filo de espada, a ciegas, creyendo detener la verdad. Es de juzgado de guardia sin guardias en el juzgado!!!

Cuando la democracia se supedita a la justicia se transforma en dictadura porque entrega a unos cuantos jueces los atributos de un pueblo que no los ha elegido para ello.

Hoy en día si tenemos tan mala opinión de la justicia es porque no la basamos en los valores y las enseñanzas de nuestro Señor, sino en los de los hombres. Así nos va.

El único juico relevante de nuestra vida es aquel al que nos enfrentaremos cuando la abandonemos para presentarnos ante Dios, en presencia de Jesús nuestro Señor.

41 »¿Por qué miras la paja que está en el ojo de tu hermano y no echas de ver la viga que está en tu propio ojo? 42 ¿O cómo puedes decir a tu hermano: “Hermano, déjame sacar la paja que está en tu ojo”, no mirando tú la viga que está en el tuyo? Hipócrita, saca primero la viga de tu propio ojo y entonces verás bien para sacar la paja que está en el ojo de tu hermano. (Lucas 6:41-42)

37 »No juzguéis y no seréis juzgados; no condenéis y no seréis condenados; perdonad y seréis perdonados. (Lucas 6:37)

Hacer justicia y juicio es para Jehová más agradable que el sacrificio. (Proverbios 21:3)
Que Dios os bendiga, Alfons <><

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